Bogotá,
16 de noviembre de 2012.- Once medallas –seis de oro, tres de plata y dos de
bronce– fueron obtenidas por miembros del SENA en los XIX Juegos Deportivos
Nacionales. Los instructores Lina
Constanza Arango, del Centro de Formación en Actividad Física y Cultura,
de la Regional Distrito Capital, y Víctor Medina, del Centro de Comercio y
Turismo, de la Regional Quindío; así como los aprendices Óscar Andrés
Micanquer, Jhonny Alexander Guaca y Jennifer Vallejo Guaca, de la Regional
Cauca, fueron quienes lograron las preseas. Además, Luken Bent, aprendiz de la
Entidad en Bogotá, es el entrenador de 13 jóvenes que ganaron cuatro oros,
cuatro platas y tres bronces en las justas.
Lina
Constanza Arango se destaca como la mejor deportista fondista del país, ratificando
el excelente nivel en su proceso como atleta de alto rendimiento.
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Lina
Constanza, cuya menuda figura contrasta con su enorme bondad y evidente
sencillez, expresa en un lenguaje espontáneo que le brota a borbotones y con el
que da cuenta de la alegría, que pretende “ser un ejemplo, no por una medalla,
sino por ser una deportista integral que saluda al llegar a un sitio, que da
las gracias, que es honesta y tiene virtudes, buenos fundamentos y valores”.
La
mujer de cabellos claros y piel tersa de su segunda juventud –que apenas
empieza–, afirma que “eso es lo que forma a un verdadero deportista”.
Hace
más de 19 años cuando ella acompañó a su amiga de la escuela a una piscina,
jamás imaginó que le quedaría gustando la natación; menos aún que, con los
años, se convertiría en un referente de este deporte en el país: en los
actuales Juegos Deportivos Nacionales acumula cinco preseas doradas y una de
plata que se suman a otras obtenidas en Colombia y el exterior.
“Desde
muy pequeña me incliné hacia la práctica deportiva; recuerdo que aprendí a
nadar sin el permiso de mis padres cuando apenas tenía 12 años... desde
entonces he participado en distintas competencias nacionales e internacionales.
Jugábamos, junto a mi hermanita, baloncesto y voleibol, hasta que una amiga de
la escuela me dijo que la acompañara a nadar, y por esas cosas de la vida
resulté nadando con ella y poco a poco me fui vinculando a la natación con
aletas”.
Desde
entonces, siempre ha contado con el apoyo de sus de sus padres y, ahora casada
con Diego, un joven entrenador deportivo. encontró total respaldo en él, quien
–sin importar el alto costo de la indumentaria– le ayuda económicamente para la
adquisición de: aletas, vestidos de baño, gorros y gafas. “Mi esposo es un
apoyo incondicional; me impulsa a seguir adelante, me motiva y facilita mucho
mi entrenamiento alrededor la natación”.
Su
talento se fortaleció con el tiempo. En su vasta trayectoria en la natación ha
participado en los Juegos Panamericanos y en certámenes mundiales.
Victoriosa
En
su corta estadía por Popayán (Cau.) participó con la delegación de Bogotá en
las modalidades subacuáticas de piscina en 400, 800 y 1.500 metros superficie,
y en los relevos de 4 por 200 metros superficie, logrando cuatro medallas de
oro. Luego se desplazó a San Antero (Cór.), donde participó en el relevo de 4
por 3.000, y en la prueba de 6.000 metros en aguas abiertas, alcanzando la
primera medalla de plata y la quinta dorada.
“Este
triunfo representa un logro para todos, se debe a un esfuerzo
multidisciplinario, a un trabajo en equipo, que ratifica el buen nivel
deportivo de la delegación de Bogotá. Me siento muy satisfecha porque es una
carrera deportiva de más de 19 años, que me ha exigido mucho esfuerzo y
sacrificio”, manifiesta Arango.
La
natación con aletas es una modalidad que se practica con un implemento llamado
monoaleta, el cual tiene una especie de zapato pegado, que asemeja la forma de
una aleta de sirena y el deportista lo usa en los pies; las manos se ubican en
posición hidrodinámica a lado de las orejas a fin de desarrollar un movimiento
ondulatorio que a su vez ejercita los glúteos.
La
última prueba en la que participó Lina, en esta edición de los Juegos
Nacionales, y en la que también obtuvo la medalla de oro, fue la de seis
kilómetros. Esta modalidad consta de cuatro boyas que se ubican en el mar en
forma de rectángulo; el deportista ejecuta cuatro vueltas de 1.500 metros que
se deben realizar sin detenerse.
Gracias
a su Licenciatura en Educación Física y a una especialización en Administración
y Entrenamiento Deportivo, Lina se vinculó con el Centro de Formación en
Actividad Física y Cultura, del SENA en Bogotá, el cual ha sido un apoyo
importante en su proceso; señala que sus compañeros instructores, con los que
comparte a diario, le brindan consejos y recomendaciones de relajación que pone
en práctica durante las competencias.
“He
tenido que ausentarme en varias ocasiones debido a mi participación en
campeonatos que requieren un tiempo de ausencia; mis compañeros me han ayudado
a cubrir algunos espacios y los aprendices entienden los motivos de mis
ausencias, aunque nunca he parado con mis responsabilidades como instructora”.
José
Giovanny Lozano, subdirector del Centro de Actividad Física y Cultura destaca
que “Lina es una instructora modelo y un ejemplo, además genera un enorme
aporte al centro por toda su experiencia y conocimiento, que contribuye al
mejoramiento de la formación. A la vez, su presencia hace que los aprendices
reciban una transferencia de conocimientos de manera vivencial en la modalidad
en que ella se desempeña”.
Su
vida y el centro de formación
Un
día normal de Lina inicia a las 5:00 a.m. 20 minutos después llega al complejo
acuático, donde se sumerge en la piscina y da rienda suelta a su gusto por la
natación; luego de dos horas de duro entrenamiento hace una pausa, almuerza y
descansa una hora para que su cuerpo tome aliento nuevamente. Después, continúa
con el entrenamiento, hasta las 5:00 p.m., momento en el que se desplaza al
Centro ubicado en Kennedy para brindar formación en Entrenamiento Deportivo a
30 jóvenes de diferentes barrios de la localidad.
Allí,
los jóvenes se preparan de 6:00 a 10:00 p.m. con la instructora, que distribuye
muy bien el tiempo para que todo le salga perfecto, para así cumplir con los
objetivos del programa. La instructora reconoce que nada es fácil en la vida y
que todo cuando se logra con sacrificio es más satisfactorio.
El
Centro de Actividad Física y Cultura, en el que trabaja la medallista, está
vinculado a la Red Hemisférica de Actividad Física para las Américas, la Red de
Iniciativas para la Promoción de la Actividad Física y la ONG Internacional
Agita Mundo, que coordinan actividades a nivel mundial para estimular el
deporte físico, de igual forma establece estrategias enfocadas al
comportamiento saludable para que personas de todas las edades incrementen su
actividad física y mental.
“Fundamentalmente
el trabajo que se ha desarrollado este año consiste en la ampliación de las
normas de competencia laboral en actividad física y entrenamiento deportivo y
otros procesos que hacen más competitivo y productivo el sector de la actividad
física en el país”, asegura Jorge Eduardo Rivera, coordinador de Formación
Complementaria.
El
próximo año el centro ofertará 5.700 cupos de formación técnica y tecnológica
en áreas del conocimiento de actividad física y cultura; así mismo, 48.000
cupos en formación complementaria en actividad física, entrenamiento deportivo,
dirección técnica de fútbol, organización deportiva, expresión escénica,
actuación, escenografía, teatro y danza.
De
otra parte, con el acompañamiento del Ministerio de Cultura, el centro ha
desarrollado la norma de competencia laboral en interpretación de danza, lo que
permitió la certificación y evaluación de competencias en Danza, además de la
generación del programa técnico en Interpretación de la Danza, dirigido aorganizaciones del sector cultural como el Ballet Nacional –legado de SoniaOsorio–.
A
la altura del oro
Otra
de las medallas de Oro en los Juegos Deportivos Nacionales fue otorgada al
cuyabro Víctor Medina, instructor de la Regional Quindío quien participó en
Salto con Pértiga y obtuvo este reconocimiento gracias a la dedicación y
disciplina de su entrenamiento. Su marca fue de 5,00 metros.
“Éste
logro era algo de esperarse dada la seriedad con la que el deportista trabaja,
sin importar que hace ya bastante tiempo está en la cima de la disciplina en el
país”, menciona su entrenador, Jorge Beltrán.
Medina
quien hace parte del centro de Comercio y Turismo, donde forma a los aprendices
en el idioma inglés, tiene 28 años y agradece este triunfo que con dificultades
alcanzó, debido a que presentaba lesiones que no fueron impedimento para ser el
ganador, “el compromiso y la constancia me llevaron a alcanzar esta nueva
meta”, afirmó el deportista.
C.S. Emilce Rodriguez/ SENA Regional Cauca